Seguramente has tenido una conversación con tus amigas y amigos y has escuchado las experiencias de cada uno. Es normal terminar comparándolas con y las comparaste con las tuyas. Ellos también lo hacen, todo lo hacemos, nos comparamos, el tema está cuando los demás empiezan a decirte que eres un obsesivo del sexo. Es normal, algunas personas llegan a hacer cosas sexuales que para otras es impensables, y que por eso llaman mucho la atención a la hora de la reunión. Sin embargo si quieres confirmar si eres una obsesiva del sexo, ten en cuenta los siguientes puntos:
- Practicas mucho el voyerismo: El voyerismo es el acto de tener placer sexual por el hecho de mirar a una persona que está teniendo relaciones o está haciendo el amor. Una mujer es capaz de aumentar notoriamente la libido si auspicia tales escenas. También es muy común que estás personas quieran que sus parejas se toquen así mismas para aumentar su placer.
- Animarte al bondage: muy de moda últimamente, se trata del juego de la esclavitud sexual. Si eres una adicta al sexo te gustará vendarle los ojos a tu pareja o atarlo a la cama, de la misma forma que él haga lo mismo contigo. Todo lo que provoque incertidumbre y sumisión será encantador, y te excitará más.
- Realizar siempre sexo oral: si eres una compulsiva del sexo, no dejarás pasar en ninguna oportunidad el hecho de hacerlo. Lo sabrás todo, hacerlo con la boca, con los labios y la lengua, usando cremas, chocolate y todo tipo de agregado.
- Estimularse con vídeos: si llegas al punto de estar con tu pareja y tener videos o películas porno puesta de fondo para estimularse y excitarse más, es un gran signo de que te encanta el sexo y todas sus posibilidades.
- Beso negro o lluvia dorada: dos de las prácticas que no todos se animan a realizar puesto que les resultan desagradables, pero todo adicto al sexo lo hará. El beso negro se trata de dar besos en el ano, mientras que la lluvia dorada consta de rociar el cuerpo de la pareja con orina.
- Realizar seguido sexo anal: si eres una obsesiva en el sexo sabrás muy bien que esta práctica no puede faltar, y cada vez que tengas un encuentro generaras nuevas poses y movimientos para que el sexo resulte de lo más placentero.