Durante los primeros años de vida en la juventud, la excitación y la posibilidad de experimentar son tan grandes que cualquier cosa nos vale para tener sexo. Sin embargo hay algunas cuestiones que son necesarias tener en cuenta para que el sexo en la juventud sea el mejor de todos. Si no te han dado estos consejos previamente, puedes leerlos aquí:
- Usa protección: cuando uno es grande es posible que ya haya experimentado sensaciones tales como pensar que se está embarazada, o que se tiene una enfermedad de transmisión sexual, por eso si nos viéramos de adolescentes nos recomendaríamos usar siempre un método anticonceptivo para evitar penosos y malos ratos.
- No debes hacerlo forzado: debes elegir a la persona, el momento, y el lugar donde hacerlo. Aunque a veces suele ser espontaneo, se tiene que encontrar en la persona el sentimiento de amor o de profunda atracción. De lo contrario te cargarás una mala experiencia que puede marcarte mucho más adelante. Además, evita acostarte con alguien para darle celos a otra persona, o por impresionar a amigos no sirve de nada, terminarás sintiéndote vacío y muy mal y quizás puedas herir a otra persona.
- El sexo no es como en Hollywood: ni como lo es en Hollywood ni como lo es en los vídeos porno. Todo lo que hagas debe parecerte normal. Por lo general no suele haber rosas por todos lados, ni tampoco tu compañero tendrá el aspecto de Brad Pitt, y las poses que quieras hacer no serán de todo cómodas o fáciles de realizar. Será más bien todo lo contrario, algo más sucio y sacudido, y será esplendido de esa forma. Lo que no quiere decir que de vez en cuando no se pueda generar un momento especial.
- Debes dejar los complejos de lado: cada uno debe quererse a uno mismo. Es normal que siendo adolescentes se busque parecer al cuerpo que tiene la modelo de la última revista que nos compramos, pero no debe ser de esa manera. Para tener sexo hay que quererse a una misma y así los otros nos verán hermosas. Ten en cuenta que si tu te sientes segura contigo misma, eso se va a reflejar enseguida y el otro lo va a sentir, y no hay nada más sensual y erótico que una mujer o un hombre seguro de si mismo. No tienes que rendir ninguna prueba con lo cual relájate al respecto.