Los amantes siempre están plagados de mucha sensualidad y secretísimo a su alrededor ya que en muchas ocasiones deben vivir clandestinamente. Sin embargo, cuando hablamos de amantes no siempre nos estamos refiriendo a serle infiel a nuestra pareja, sino que podemos ser perfectamente amantes en la cama siempre con nuestra pareja.
Para ser un buen amante, tanto sea con tu pareja o con una tercera persona te sugerimos que sigas parte de estos consejos y verás la diferencia al instante:
–Encender la pasión: un buen amante sea hombre o mujer se deja llevar por su pasión y por todo lo que siente en su interior con el fin de liberar al máximo todos esos sentimientos. En muchas ocasiones hay personas que les da timidez o que creen que si hacen algo en particular no lo verán con buenos ojos, sin embargo encender la pasión y mostrarla es lo mejor que un buen amante puede hacer.
–Sensualidad: la sensualidad debe estar presente en todo momento, no sólo en la cama sino, principalmente en la forma de vestirse. Con lencería y ropa erótica te sentirás mucho más sensual y eso se mostrará en tu actitud. Lo mismo sucede con tu pareja, hazle sentir sexy en todo momento y dile lo que te gusta que se vista con esa ropa.
–Dar y recibir placer: Un buen amante es generoso con el otro pero también permite que le den placer en el momento en que su pareja desee. Se trata de buscar el equilibrio en todo momento y de que la iniciativa vaya cambiando y que no siempre la tenga la misma persona, de ahí la propia iniciativa y la sorpresa que puede dar un buen amante iniciando a dar placer a la pareja cuando no se lo espera.
-Atreverse: los buenos amantes están siempre pendientes de hacer nuevas cosas en la cama con su pareja y así adentrarse en nuevas iniciativas que ayuden a tener una mejor relación sexual. Bien es sabido que en las parejas con el tiempo la monotonía y lo cotidiano lleva al aburrimiento con lo cual es momento de buscar cosas nuevas para que la pasión siga adelante.
–Sin prisas: el buen amante sabe que no hay prisas a la hora de tener sexo, que la lentitud de movimientos es buena consejera y que siempre es bueno sorprender con movimientos suaves y lentos para luego ir aumentando su velocidad.
Como verás, ser un buen amante no es tan difícil sino que todo depende de cada uno y de lo que quiera demostrar a la hora del sexo.